Esta historia está muy ligada con la de Los Guerreros Shogitai.
Seguramente si os digo Saigo Takamori, os suena a chino… más bien os suena a japonés, ja, ja, ja !!!
Ahora si os digo que es el de la película «El Último Samurai» os empezará a sonar un poco mas.
La verdad es que realmente era como lo representa la estatua el de la película no se le parece mucho, pero que le vamos a hacer, el cine es el cine.
Bien, Saigo Takamori luchó del lado del Emperador en la Guerra Boshin que acabó derrotando al Shogun Tokugawa y a los Guerreros Shogitai que lo apoyaban.
Después de esto comenzó la Restauración Meiji en la que el Emperador comenzó a hacer grandes cambios con el fin de modernizar un país que prácticamente había estado aislado del mundo exterior. Como inciso os comento que antiguamente muchos comerciantes viajaban a Japón para conseguir por ejemplo gusanos de seda y telas de seda para venderlas en Europa con riesgo para sus vidas por que de ser encontrados dentro del país la pena de muerte.
Estos cambios acabaron con el sistema feudal y significó la desaparición de la clase samurai. Se formó un ejército regular al servicio del Emperador con lo que los samurais perdieron los pocos privilegios que les quedaban y perdiendo Japón como país gran numero de sus tradiciones ancestrales.
Esto no gusto a muchos samurais que habían apoyado al Emperador y empezaron a aparecer numerosas rebeliones y revueltas. El propio Saigo Takamori protagonizó la Rebelión Satsuma que fué aplastada por las tropas imperiales en la Batalla de Shiroyama. Saigo Takamori no aceptó la rendición y ejecutó el Código Samurai, o sea, se quitó la vida haciéndose el Harakiri, de forma que su honor quedaba intacto.
Fué un lucha desigual ya que el ejército imperial contaba con ametralladoras compradas a los países extranjeros que veían en Japón un nuevo horizonte comercial.
Aún así Saigo Takamori fué perdonado posteriormente por el Emperador Meiji.
Yo os recomiendo ver o volver a ver la película «El Último Samurai» pero esta vez tener en cuenta la perspectiva de la verdadera historia.
