La Plaza de España en Sevilla se construyó en 1914 y se tardaron nada menos que 15 años en terminarla con motivo de la Exposición Iberoamericana del año 1929.
Se encuentra en el Parque María Luisa y tiene forma de media luna abierta hacia el parque.
Este diseño de media luna simboliza a España con los brazos abiertos para recibir a sus antiguos territorios americanos y se abre hacia el Guadalquivir porque era el camino de unión entre España con el Nuevo Mundo.
En la plaza podemos ver 48 bancos que representan a cada una de las provincias españolas, cada uno de ellos con unos azulejos que representan el escudo de la provincia y algún hecho histórico destacado de cada una. Todas no… Todas menos Sevilla… ¿Cómo va a ser esto se preguntarán?
Los bancos están distribuidos en 4 partes, al principio y al final de cada tramo hay un paño de azulejo pisano relativo a Sevilla, por lo que al final Sevilla es la más representada. 😉
Por cierto, si se fijan en la foto anterior verán sobre las columnas medallones con bustos de españoles ilustres.
Cada uno de los extremos de la media luna está rematada con dos torres de 74 metros que le confieren un aspecto barroco.
Además en el centro hay una fuente, alrededor de la cual se encuentra un canal que separa el paseo donde están los bancos de la zona abierta de la plaza. Entre ellos se unen por 4 puentes azulejados bajo los cuales se puede pasear en barca y que representan los 4 antiguos reinos de España: Castilla, Aragón, León y Navarra.
Quizás sea la más bonita, y si no lo es, una de las más bonitas de todas las plazas de España, aquí ya saben…¡¡Para gustos colores!! A nosotros nos pareció preciosa y cargada de simbología.