He querido hacer una especie de reseña especial a este gran desastre que sufrió Japón el 1 de Septiembre de 1923, el Terremoto de Kanto.
Todos habéis oído hablar del Cinturón de Fuego del Pacífico. Por si alguno todavía no lo sabe y por resumirlo de la forma más sencilla posible os diré que es la zona del Pacífico donde convergen grandes placas tectónicas y por lo tanto donde se producen la mayoría de los grandes terremotos que suceden en el mundo. Esta gran zona de subducción provoca una intensa actividad sísmica y volcánica.
En nuestro Blog lo hemos mencionado mucho cuando hemos hablado sobre todo de algún templo o santuario que habitualmente fue total o parcialmente destruido por este terremoto.
Retomando el tema lo primero será ubicar la zona de Kanto.
Ahora vayamos al grano e intentemos explicar como sucedió este desastre. El 1 Septiembre de 1923 a las 11:58 de la mañana comenzó el temblor en toda la llanura de Kanto. El temblor casi alcanzó los 8 grados en la Escala Richter. Para las construcciones de la época esta intensidad fue algo verdaderamente apocalíptico.
Se produjo a una hora en el que la mayoría de las personas se encontraban con el fuego de gas encendido para preparar la comida. esto provocó que lo que no destruyó el Terremoto lo destruyeran los posteriores incendios de estructuras en los que murieron calcinadas miles de personas. Imagina los restos de la ciudad convertida para sus habitantes en un laberinto sin salida de fuego.
En 1923 las comunicaciones eran bastante malas y después de la destrucción todavía era más difícil mandar noticias al exterior de lo acontecido. Esto que pongo a continuación es una traducción de las noticias mandadas a un medio de prensa procedente de la región devastada. Con la red de comunicaciones prácticamente destruida se mandaron cerca de 500 mensajes de ayuda utilizando palomas mensajeras a las ciudades cercanas a Tokyo.
El 3 de septiembre: “Se informa que 100,000 personas están muertas y 200,000 construcciones destruidas, incluyendo el sector comercial de Tokio y la mayoría de las oficinas de gobierno. Una estación de energía eléctrica se desplomó matando a 600 personas. El arsenal de Tokio explotó. El sistema hidráulico se halla totalmente destruido. Almacenes de alimentos se quemaron hasta los cimientos. Los incendios todavía no están controlados”.
El 4 de septiembre: “Las víctimas aumentan, posiblemente 150,000 muertos. Las estaciones del ferrocarril en ruinas. El túnel más largo de Japón, en Sasako, se derrumbó y sofocó a todos los pasajeros de un tren. El río Sumida se desbordó y cientos de personas se ahogaron. Todos los puentes están caídos. Casi todas las escuelas, hospitales y fábricas, destruidos. Los centros de veraneo en la bahía de Sagami (30 kilómetros al oeste de Tokio), arrasados”.
El 5 de septiembre: “Muchos trenes de pasajeros y de carga se descarrilaron causando una gran pérdida de vidas. Marejadas de casi 12 metros de altura inundaron la bahía de Sagami. causando destrucción masiva; luego se retiraron, descubriendo el fondo del océano. Los tanques de almacenamiento de petróleo en Yokohama explotaron. Unas 40,000 personas perecieron quemadas por un ciclón de fuego en el parque de Tokio. Otras 1,600 personas fueron aplastadas y luego quemadas en el incendio subsecuente cuando la fábrica de hilados y tejidos de algodón Fuji se derrumbó.
El Hospital Americano fue arrojado entero y con los pacientes desde los riscos sobre Yokohama. El conde Yamamoto, recientemente nombrado primer ministro, estaba tratando de formar un gabinete en el Club Naval de Tokio cuando el piso se hundió matando a 120 de sus colegas. Desgracias estimadas: 500,000 personas sin hogar, de las cuales muchas están heridas. El total de muertes, en una población de tres millones, es desconocido. Unos 1,500 prisioneros fueron liberados de la prisión de Ichigaya, Tokio, cuando el edificio amenazaba derrumbarse, y otros más han escapado de otras prisiones. Ahora se ha extendido por todas partes el robo con violencia, el pillaje en locales abandonados, las violaciones y asesinatos sin motivo. De esto se ha culpado, al parecer injustamente, a varios miles de inmigrantes coreanos que viven en la ciudad y algunos cientos han sido linchados. Se ha declarado la ley marcial”.
La siguiente noticia es del día 6 en la que se informa que Yokohama había sido borrada del mapa asi como prefecturas vecinas de Chiba, Kanagawa y Shizuoka.
En Tokyo el primer temblor y las continuas y devastadoras réplicas tanto rompieron las tuberías de agua como de las de gas por lo que era prácticamente imposible luchar contra las llamas. En la tierra se abrían enormes grietas que se tragaban personas, coches, tranvías…. y luego se cerraban como mandíbulas sobre su presa. Toda la red eléctrica y telefónica fue destruida y al caer sobre las calles electrocutaban a los supervivientes.
Gran parte de las casas que había en las colinas fueron víctimas de deslizamientos de tierras y todo lo que se encontraba a su paso era arrastrado hacia el mar. Pueblos enteros, trenes de pasajeros, personas… todo fue arrojado al mar por estas avalanchas de tierra y lodo.
Por si fuera poco se generó un tsunami con olas de hasta 20 metros que azotó la isla de Oshima, la Península de Izu y la Península de Boso, haciendo crecer más el numero de víctimas mortales.
En la Bahía de Yokohama había numerosas embarcaciones llenas de gente intentado alejarse de la costa buscando refugio en mar abierto pero una gran fuga de aceite y el fuego que llego a la orilla hizo que el agua se convirtiera en un mar de fuego del que muy pocos lograron escapar.
Corrieron rumores de que los coreanos se dedicaban al saqueo y se formaron una milicias civiles que acabaron asesinando a cientos de ellos que posteriormente se sumaron al numero de víctimas.
El 60% de la población se quedó sin hogar y aproximadamente hubo unas 143.800 muertes.
Una tragedia que hizo que los estándares de construcción japonesa cambiaran radicalmente para que esta catástrofe no se pudiera repetir nunca más. De hecho una de las cosas que se crearon en el nuevo Tokyo fue numerosos y grandes parques para que en caso de una emergencia similar sirvieran de refugio para la población.
Hemos recopilado esta serie de fotos en internet para que se hagan una idea de la magnitud, ya que como saben una imagen vale más que mil palabras.
En 1960 se designó al 1 de septiembre como el Día de la Prevención de Desastres para conmemorar el terremoto y concienciar a las personas de la importancia de prepararse ante los desastres, debido a que septiembre y octubre es la temporada alta de ciclones. Organizaciones públicas y privadas realizan entrenamientos de desastres. Tokio está localizada cerca de una falla bajo la península de Izu que, en promedio, causa un gran terremoto alrededor de 70 años….. Peligrosamente la fecha ya se ha cumplido, esperamos que la predicción falle y esta tragedia no vuelva a pasar.