Catedral ortodoxa de Nuestra Señora de la Asunción

Los comerciantes griegos en Budapest, durante el transcurso del siglo XVIII, vieron como su número aumentó de tal manera que sobre el 1784 consiguieron los permisos para construir su propia iglesia y celebrar su culto. Hasta ese momento tenían que compartir la Iglesia serbia sólo dos domingos de cada mes.

En 1801 fue consagrada por el sacerdote griego Dionisije Popovics a la Señora de la Asunción.

Como en cualquier iglesia ortodoxa lo más llamativo es el iconostasio, obra de madera del tallador de madera Nikolaos Ioánnu y del pintor Anton Kuchelmeister. No fue hasta el año 1809 hasta que la iglesia no estuvo finalizada por dentro y por fuera.

Durante la II Guerra Mundial las torres de la iglesia sufrieron graves daños y, tras muchas renovaciones, no fue hasta 1996 cuando llegó a su estado actual.

Evidentemente no es ni de lejos la más grande iglesia ortodoxa que hemos visitado pero si merece una visita, además, las vidrieras con estos animales tan peculiares nos encantaron.

Para acabar este post y por explicar un poco este tema de los animales hacemos un breve inciso sobre ello. Los 4 apóstoles, Mateo, Lucas, Marcos y Juan son representados por 3 animales y por un ángel, este último en el caso de San Mateo. El símbolo de San Juan es el águila que mira hacia el Sol porque su evangelio comienza con la contemplación del Jesús-Dios.

En San Lucas vemos el Toro porque su evangelio comienza con la visión del Templo, donde se sacrificaban toros, bueyes, carneros… Y en el caso de San Marcos el León es en base a que su evangelio comienza con la peregrinación del desierto donde se interpretaba que había animales salvajes.

Todo esto es una explicación muy por encima de esta simbología pero vale como base para que si lo vemos en una iglesia sepamos de donde proviene esta relación.

Hasta el próximo post. 😉