Nuestra ruta de hoy empieza en la estación de metro Chaussée D’Antin – Lafallete a primera hora de la mañana porque hoy va a ser un día con muchas cosas que ver.
Lo primero nos acercamos a las Galerías Lafallete para dar un paseo, ver su cúpula de cristal y hacer un poco de tiempo esperando a que abran la Ópera Garnier.
Ahora vamos a aprovechar nuestro Paris Pass en el que venía el bono para el autobús turístico porque si cogemos el metro tenemos que hacer varios transbordos y de esta forma vamos directos hacia el Arco del Triunfo mientras disfrutamos de las vistas de la ciudad como por ejemplo un recorrido fugaz a lo largo de los Campos Elíseos.
Desde donde nos deja el autobús hay que cruzar la rotonda por un túnel para llegar hasta el centro. No intentéis pasar por arriba porque lo más probable es que algún conductor os atropelle, dicen que esta rotonda es de las más peligrosas de París. Volvemos sobre nuestros pasos a coger otra vez el siguiente autobús que nos llevará a Trocadero.
Pasear por Trocadero con la fuente en funcionamiento mientras nos vamos acercando a la Torre Eifell es una de las experiencias más bonitas de París. Muy importante para subir a la Torre Eifell es que con mucha antelación y a través de internet compréis las entradas sino queréis hacer una cola de una hora y pico más o menos.
Nosotros, subimos en ascensor hasta lo más alto pero para bajar ya estabamos un poco cansados de hacer cola así que decidimos bajar andando. No se preocupen que bajar no cuesta tanto como subir y nos da una visión distinta de la estructura de la torre.
Ahora hemos aprovechado para comernos un perrito caliente y beber agua de un puesto justo a los pies de la torre. No lo vimos tan caro como nos habían comentado pero la verdad es que el concepto de perrito caliente era una baguette de pan con una salchicha dentro donde va la miga y un chorro de Ketchup…. Estos franceses no han visto un perrito caliente en condiciones en su vida…
Paseando por los Campos de Marte pasamos junto al Monumento de la Paz y frente a la Escuela Militar donde al parecer Napoleón hizo carrera. Nos dirigimos hacia el Palacio Nacional de Los Inválidos pero primero visitamos la Tumba de Napoleón que se encuentra bajo el abrigo de la Iglesia de la Cúpula Dorada.
Esto no nos lleva mucho tiempo y entramos al Museo de la Armada que está dentro del Palacio y salimos por el lado opuesto. Desde aquí tenemos dos alternativas, una era volver a coger el autobús o el metro para regresar a los pies de la Torre Eifell, y la otra era ir tranquilamente dando un paseo por la orilla del Sena. Como no íbamos mal de tiempo fue ésta última la que al final decidimos hacer.
Cuando llegamos al Embarcadero volvemos a usar nuestro Paris Pass que también incluía el Crucero por el Sena con guía hablada en español y de paso descansabamos un poco de tanto caminar.
Al regresar tuvimos que esperar muy poco para que iluminaran la Torre Eiffel y estuvimos un ratito contemplando como el día se oscurecía a la vez que más parecía brillar las luces de la estructura.
Y después de disfrutar de el espectáculo de luces nos volvemos al hotel.
