Nuestra cuarta y última parada del Círculo de Oro en Islandia la hacemos en la caldera del Volcán Kerið.
Toda la zona es volcánica de lavas negras pero el Kerið presenta un color rojo diferente a todo lo que le rodea. Además es de los pocos en los que después de 6.000 años desde su formación mantiene casi intacta su caldera.
Es un pequeño recorrido, sin dificultad, por el borde del cráter mientras podemos ver el bonito azul aguamarina del agua del pequeño lago que hay en su interior.
Esta caldera se formó una vez concluida la erupción, es decir, el peso del material hizo ceder el terreno sobre la pequeña cámara de lava bajo él dando lugar a la forma que podemos ver hoy en día.
Ya el día empieza a irse y tenemos que volver a Reikjavík, todavía quedan muchas cosas que ver de Islandia 😉
